Alianza entre el ICBF y Pisotón para formar a madres comunitarias

Gracias a un convenio entre el ICBF y el Programa Pisotón de Uninorte, 1400 madres comunitarias de los departamentos de Atlántico Caldas, Cundinamarca, Chocó, Guajira, Meta y Santander, realizarán un diplomado mediante el cual desarrollarán talleres sobre crecimiento y desarrollo, desarrollo psicoafectivo, técnicas lúdico-educativas, protección y cuidado de la primera infancia e individuo y desarrollo.

De acuerdo con Karen Abudinen, directora de primera infancia del ICBF, están muy felices de trabajar con Uninorte y así poder implementar la estrategia de Pisotón. Asimismo, resaltó lo importante de este convenio durante el lanzamiento oficial que se llevó a cabo el jueves 12 de marzo en las instalaciones de Uninorte.

"Para nosotros lo más importante es que desde la educación inicial no solo pensemos en los espacios seguros y protectores o en una línea pedagógica fortalecida para los niños, sino que pensemos en lo psicosocial, en lo afectivo, en lo que requieren nuestros niños para ver la verdadera transformación, porque la paz y la equidad viene de todo ese amor", dijo Abudinen.

De igual manera la directora de primera infancia del ICBF resalto que estas 1400 madres que serán beneficiadas serán multiplicadoras. "Cada madre atiende a 12 niños, lo que quiere decir que vamos a tener 20 mil niños beneficiados del programa, pero además 20 mil familias. Miremos lo importante que es esto, ya que indirectamente podemos estar llegando a 50 mil personas en todos estos departamentos".

Por su parte Ana Rita Russo, directora del Programa Pisotón, destacó que el convenio comienza con una prueba piloto que se llevará a cabo durante el diplomado, donde cerca de 5000 niños entre los 3 y 5 años se verán favorecidos con este convenio.

"El diplomado estará comenzando el 28 de marzo, y esta primera etapa iniciará con el módulo crecimiento y desarrollo, luego sigue el módulo de desarrollo psicoafectivo y finalizamos con autoestima", expresó la directora de Pisotón.

Aunque en principio el programa va dirigido para impactar a los niños, el objetivo final es transformar cada uno de estos hogares, convirtiéndolos en hogares saludables. "En hogares que realmente irradien amor y afecto es lo que estamos buscando, tomar el afecto como parte fundamental y transformadora para llegar a la equidad y para llegar a la paz", dijo Abudinen.

Por José Cuadrado Doria