Soldado de Salamina, un libro que reflexiona sobre memoria histórica
El 11 de febrero, en el Café Du Nord, el rector Adolfo Meisel, en compañía de los profesores María Henar Lanza, Artevic Holgueras, Sören Brinkmann y María del Pilar Osorio, discutieron sobre aspectos de la novela desde diferentes aristas del conocimiento.
Para la tercera edición del Poder de la Lectura, el libro escogido es el Soldados de Salamina. La novela de Javier Cercas reflexiona sobre las decisiones que tomamos como seres humanos, a través de una reconstrucción que une la ficción y la historia para contar un hecho ocurrido durante la Guerra Civil Española cuando un soldado republicano le perdona la vida al ideólogo del fascismo, Rafael Sánchez Mazas.
El 11 de febrero, en el Café Du Nord, el rector Adolfo Meisel, en compañía de los profesores Henar Lanza, Artevic Holgueras, Sören Brinkmann y Pilar Osorio, discutieron sobre aspectos de la novela desde diferentes aristas del conocimiento.
El rector Meisel comentó que escogió el libro por varias razones. La primera de ellas porque fue una recomendación que hizo Mario Vargas Llosa en una entrevista y segundo porque España será el invitado especial para la próxima Cátedra Europa. Agregó que Cercas es uno de los grandes novelistas contemporáneos y que en ocasiones el público no valora a los autores sino hasta tiempo después.
Osorio, docente del departamento de Español, comentó que una de las reflexiones que le suscitó la lectura es la pregunta filosófica de entrada: “¿Cómo narramos la violencia?”. Señaló que en el transcurso de la narración hay un giro sobre los afectos y las emociones que vale la pena tener, y en ese sentido, qué significa ser un héroe.
Brinkmann, del departamento de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales, apuntó que la novela se publicó en un clima interesante, en 2001. En ese entonces en España nació el movimiento por la memoria histórica, con el propósito de recuperar la memoria republicana que se había olvidado por cómo se llevó a cabo esta “transición pacífica hacia la democracia”, comentó.
Tras la muerte de Francisco Franco en 1975 se terminaron 40 años de propaganda oficial y con ellos hay un cambio de gobierno. “Lo que hace la transición es llegar a un acuerdo de ambos lados, de echar al olvido este pasado, de no hablar de la Guerra Civil, justamente para llegar a un futuro democrático pacífico”, complementó el profesor Brinkmann.
El profesor Artevic Holgueras leyó a los asistentes la cita de Hesíodo que abre el libro ("Los dioses han ocultado lo que hace vivir a los hombres") para considerar que Cercas abandona el propósito de responder qué pasa por la mente del soldado que encañona a Sánchez Mazas y le perdona la vida en favor otro propósito: hacer una apología de quienes lucharon por la libertad porque responder la primera cuestión es imposible.
Lanza afirmó una de los aspectos que causó dificultades en la recepción de la novela fue esta unión entre ficción e historia que dibuja una linea muy fina y especialmente problemática en el contexto político del país. El propio Cercas ha señalado que no le interesa escribir novelas sobre la Guerra Civil, y a ello responde el giro narrativo que tiene el texto y los diferentes focos que utiliza.
La docente del departamento de Humanidades y Filosofía concluyó que una de las reflexiones que deja el libro es que la mayor venganza fue no haber matado a Sánchez Mazas. Esta realidad se manifestó con el tiempo pues los mayores opositores de su ideología fascista fueron sus propios hijos. Los tres más reconocidos fueron Miguel, destacado filósofo creador de la revista Theoria; Rafael, escritor ganador del premio Cervantes y Chicho, cantautor y creador del cancionero de la resistencia española.
Por Leonardo Carvajalino
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