Las escritoras ganadoras del concurso “Cartas de amor a la tierra“ y “Caja Creativa“

Las estudiantes de pregrado María Rodríguez, María Barrios Baza, Athina Guatecique, Dalgys Carbal y Emely Villa fueron ganadoras de las convocatorias realizadas en el marco de la Semana del Idioma, en conmemoración a nuestro idioma español y promover la escritura en la comunidad universitaria. Obtuvieron los primeros lugares en los concursos: Cartas de amor a la Tierra, realizado entre el Centro de Escritura ECO, el Instituto de Idiomas y la Oficina de Sostenibilidad; y el reto Caja Creativa, también del Centro de Escritura. 

Cartas de amor a la tierra

María Rodríguez, estudiante del pregrado de Administración de Empresas con el texto titulado: Carta de una hija, fue la ganadora entre más de 50 concursantes. 

“Los textos se evaluaron con una rúbrica para hacerlo de la forma más objetiva posible. Hubo muy buenos que reconocían esa relación con todo lo que está pasando, cómo afectamos al planeta, esa laceración del porqué yo no hago nada, y era reiterativo esa parte del perdón. Muy buenos textos”, reconoció Yanuacelly Guariguata, jurado y profesora catedrática y tutora especializada del Centro de Escritura ECO.  

María se enteró de la convocatoria por su profesor de la materia Ingeniería, Medio ambiente y sociedad “Siempre lo he tenido en cuenta (su relación con el medio ambiente), pero he tratado de ignorarlo porque sé que no está bien la tierra, así que fue una forma de pedirle perdón a través de las palabras” . 

                               
                         María Rodríguez, recibiendo el primer lugar.

El segundo lugar en la categoría en español quedó David Henríquez Leal, estudiante de Ingeniería de Sistemas con su texto: Carta de amor a la tierra. Y, en tercer lugar, Valentina Bustamante Querales, estudiante de Ciencia de Datos con el escrito: Yo en ti, como tú en mí.

En la categoría en Inglés, la ganadora fue María Barrios Baza, estudiante de Lenguas Modernas y Cultura, con su texto Dear friend, se enteró del concurso por medio del grupo estudiantil Green Generation, al que pertenece, y realiza proyectos para la protección del medio ambiente. 

“Estoy pensando constantemente en cómo mejorar mi relación con la tierra, pero también soy consciente de que no puedo hacerlo por mi cuenta, porque soy solo una persona y es muy difícil un equilibrio, pero uno no puede hacer la vista gorda, aunque a veces lo hago, porque hay tantas cosas pasando en el mundo que hay que priorizar, así que mi carta fue mi forma de decir voy a intentarlo”, señala la estudiante de Lenguas Modernas. 

En segundo lugar quedó la estudiante Isabella Chacón Villa con My lovely earth. 
 

Caja creativa

El reto de Caja Creativa tuvo su segunda versión. Este concurso inició como iniciativa de algunos estudiantes guías del Centro de Escritura para promover la producción de escritos más cercanos a un público joven y con contextos e historias similares. El formato de este concurso se presenta como un reto, en el que se asigna al azar una palabra generada por el sistema para logar la creación de un texto. El concurso contó con 5 categorías: Columna de opinión, Cuentos cortos, Poesía, Ensayo y Drabble, para que los diferentes estilos de escritura no fuera un impedimento.

La ganadora de la categoría Poesía fue Athina Guatecique Pacheco, estudiante de Ciencia Política y Gobierno con la palabra: gota. 

“Escribo desde que estoy muy pequeña y sobre todo tipo de cosas. La inspiración siempre ha estado conmigo de alguna forma, se presenta escuchando historias o leyendo, o cosas que me pasan a mí misma y de ahí nace el poema”, evocó Athina. 

En categoría de cuento corto fue premiada: Dalgys Carbal Reyes, estudiante de Relaciones Internacionales, con el texto Apocado, su palabra asignada. 

                     
             Los ganadores estuvieron en compañía de amigos y familiares en la premiación. 

Y por último, en la categoría Columna de opinión el primer lugar lo obtuvo: Emely Villa Carpentier, estudiante de Ciencia Política y Gobierno con la palabra Voto. “Para mí fue un reto salirme de mi escritura académica para hacerlo comprensible para todo el público”, concluyó la estudiante. 

         
Por Lucía Gabrielle Gómez