"Este día es la culminación de un largo camino lleno de retos, pero también de aprendizajes y gratitud”, expresó Angellys Isabel Mendoza, quien recibió el viernes, 13 de septiembre, la Medalla de Oro, el máximo reconocimiento otorgado por Uninorte a un graduando por su excelencia académica y calidades humanas, en el coliseo Los Fundadores. La joven del programa de Psicología se dirigió emocionada a sus compañeros durante la ceremonia de grados, donde 1215 estudiantes celebraron su logro en medio de aplausos y sonrisas de sus familiares, profesores y amigos. 

Durante la jornada, que se dividió en tres ceremonias (9:30 a.m., 2:30 p.m. y 5:30 p.m.), la universidad otorgó títulos en pregrados, especializaciones, maestrías y doctorados. De los graduandos, 687 pertenecían a programas de pregrado y 528 a posgrados, de los cuales 39 obtuvieron una doble titulación internacional. Además, se destacó el esfuerzo de 235 becarios de pregrado y 9 de doctorado, quienes alcanzaron su meta académica gracias al apoyo de donaciones del sector empresarial y organizaciones aliadas, como Fundación Gases del Caribe, Prodeco, Allianz y Promigas.

“Las fronteras del conocimiento se han difuminado. Cuando enfrenten el mundo laboral, será clave que sepan trabajar en equipo, aplicar sus conocimientos bajo presión y en diversos contextos. Céntrense en lo que está en sus manos, con metas realizables, paso a paso", afirmó el vicerrector académico, Alberto de Castro, a los nuevos egresados, destacando la importancia de aprender a trabajar en un mundo multicultural. 

Entre los galardonados, un grupo de 24 graduandos recibió la Medalla de Plata, 4 obtuvieron la Medalla al Mérito Universitario, 2 fueron premiados con la Medalla al Mérito Deportivo, y 20 recibieron el Pergamino al Mérito Científico. El compromiso y la excelencia de los estudiantes fueron celebrados en cada intervención.

En ese sentido, Angellys Mendoza compartió una reflexión sobre su crecimiento durante su paso por la universidad, enfatizando la importancia de la resiliencia: “No solo hemos crecido como profesionales, sino también como seres humanos. Aprendimos a enfrentar el estrés, a adaptarnos a situaciones cambiantes, a pedir ayuda cuando la necesitábamos y, sobre todo, a reconocer la importancia de nuestra humanidad”. 

De igual forma, en un emotivo mensaje desde Múnich, José Bedoya Villegas, graduando de Ingeniería Mecánica, merecedor de la Medalla de Plata y el Mérito Universitario, compartió un mensaje con los presentes. 

“Recuerdo las contadas ocasiones en que los atuendos elegantes de los asistentes a la ceremonia revelaban que un grado iba a tener lugar, mientras los estudiantes vivíamos un día común y corriente de un semestre más. Resulta curioso cómo varía la percepción de los instantes en un entorno relativamente pequeño”, expresó Bedoya. A través de sus palabras, destacó la importancia de vivir plenamente cada momento y cómo las pequeñas experiencias cotidianas dan forma a la memoria.

Agradeció a Uninorte por ser la institución que le brindó las herramientas necesarias para afrontar con éxito su carrera, resaltando los valores de rectitud, alegría y verdad que le “guían hacia numerosas oportunidades”. 

Más allá de los títulos, esta jornada de graduación celebró la resiliencia, la capacidad de adaptación y el espíritu colaborativo que caracteriza a los egresados de Uninorte. Cada uno, con sus méritos y vivencias, dejó una huella en la universidad y se preparan a para ser agentes de cambio en sus comunidades y profesiones.

Lecciones de vida desde el liderazgo de egresados

Desde 2018, la universidad ha vinculado a las ceremonias de grado la intervención de egresados líderes, que sean inspiradores para los graduandos. En esta ocasión el comunicador social y periodista Alberto Suárez, la abogada Niella Sabatino y el ingeniero civil Gary de la Rosa compartieron a los egresados experiencias personales y laborales, así como consejos que les motivaron a ser mejores profesionales y seres humanos.

Alberto Suárez Durán, egresado del programa de Comunicación Social y Periodismo y editor digital de El Tiempo, instó a los egresados a ver el grado como un punto de giro en sus vidas. “El segundo acto de sus historias comienza ahora. Después de este día de celebración, nuevos desafíos se presentarán”, expresó Suárez, quien les invitó a mantener la curiosidad y el esfuerzo constante en la vida profesional. 

Les motivó a asumir su futuro con determinación y valentía, recordándoles que los logros no son el fin del camino, sino el inicio de una nueva etapa llena de oportunidades y retos. "Siempre hay dos opciones: una, saltar el muro, otra, ser uno más de sus ladrillos", concluyó Durán al compartir el fragmento del poema Quema el armario, de Benjamín Prado.
 

Gary de la Rosa Insignares, egresado del programa de Ingeniería Civil y la Maestría en Administración de Empresas, actual director general Caribe del Grupo Argos, se unió a la celebración con un discurso sobre el éxito. “En la vida no existe un solo modelo de éxito, existe tu modelo”, comenzó, enfatizando en que cada persona debe encontrar su propio camino y definir el éxito en sus propios términos. A lo largo de su intervención, compartió tres aprendizajes que ha interiorizado durante su carrera. 

El primero, “legitimar al otro, escucharlo”, refiriéndose a la necesidad de escuchar verdaderamente a los demás en un mundo donde el tiempo personal se vuelve cada vez más escaso. Segundo, destacó la importancia de encontrar un propósito en la vida, y cómo ese propósito puede ser dinámico y cambiar con el tiempo. Y por último invitó a los graduandos a actuar desde sus propias experiencias y aprendizajes, contribuyendo al crecimiento de las personas con los que interactúan. “Mi propósito es contribuir en el crecimiento de los demás desde mis alegrías, mis miedos y mi honestidad”, finalizó.

Por su parte, Niella Sabatino Nieto, egresada del programa de Derecho y de la especialización en Tributación, y actual presidenta de la junta directiva de Probarranquilla, hizo un llamado a los egresados a creer en sus capacidades y ser auténticos. 

“Cada uno de nosotros tiene su propia esencia, explórenla y valórenla”, les dijo, recalcando el autoconocimiento y la honestidad con uno mismo. Su discurso se enfocó en el balance entre la vida personal y profesional, una lección que, aseguró, ha aprendido a lo largo de su carrera como empresaria y madre. “El balance entre las opciones que escoges y a las que renuncias es un reto diario”, compartió, añadiendo que, aunque no se puede tener todo en la vida, es fundamental buscar un equilibrio que permita crecer tanto en lo personal como en lo laboral. 

Consulte el folleto de la jornada de grados aquí.