Con una revisión de datos entre 2018 y 2023, Barranquilla Cómo Vamos presentó su más reciente Informe de Calidad de Vida, un análisis que agrupa más de 200 indicadores clave sobre las dinámicas sociales, económicas y demográficas de la ciudad. La presentación se realizó el martes, 19 de noviembre, en el Auditorio Mario Santo Domingo, en la antigua Aduana, con la participación de Lucía Avendaño, directora del programa, e Iván Verbel, investigador cuantitativo.  

Este informe, que se ha convertido desde 2007 en una herramienta indispensable para la toma de decisiones, evalúa hoy los avances de Barranquilla en áreas como pobreza, educación y migración, y expone retos persistentes en empleo, seguridad y servicios públicos. "Nuestra misión es que estos datos impulsen una ciudadanía informada y promuevan la rendición de cuentas", señaló Avendaño durante el evento.  

El informe destaca avances importantes en la reducción de la pobreza monetaria. Para 2023, la incidencia de pobreza en el área metropolitana se redujo al 29,6 %, un descenso significativo frente al 35,7 % registrado en 2022. La pobreza extrema, por su parte, pasó del 10,9 % al 6,9 % en el mismo periodo, marcando una tendencia positiva. A pesar de estas mejoras, la desigualdad, medida por el coeficiente de Gini, se mantiene alta, aunque mostró una leve disminución al pasar de 0,507 en 2021 a 0,494 en 2023.  

Sin embargo, el mercado laboral sigue siendo un desafío. Entre 2018 y 2023, el desempleo juvenil permaneció por encima del promedio nacional, y para el primer trimestre de 2024, la tasa de desempleo general superó el 11 %. Además, cerca de la mitad de los trabajadores de Barranquilla están empleados de manera informal. 

“Hemos trabajado también con centros de investigación de Uninorte, como el Observatorio de Seguridad Ciudadana. Precisamente, uno de los principales desafíos es la seguridad con el aumento principalmente de las extorsiones. También nos preocupa en la academia y en la educación superior la creciente brecha de desigualdad entre los colegios privados y los colegios oficiales. Notamos una mejora en la educación superior, pero en la educación media y básica hemos visto retrocesos”, argumentó Alberto Madero, decano de la División de Derecho de la Universidad del Norte.  

Educación 

De acuerdo con el informe, debido a los cambios demográficos, la matrícula escolar del sector público ha venido disminuyendo desde 2021 en cinco mil estudiantes por año. La educación presentó avances en algunos aspectos, como el tránsito a la educación superior, que pasó del 42 % al 50 % entre 2018 y 2023. Sin embargo, la cobertura en niveles como transición (70,6 %) y educación media (58,4 %) sigue siendo insuficiente. En cuanto a los resultados de las pruebas Saber 11, las instituciones públicas registraron una leve mejora, aunque aún están por debajo del promedio nacional.  

Otro dato relevante es el aumento en el porcentaje de docentes con formación de posgrado, una cifra que se duplicó en los últimos años, aunque sus efectos aún no son evidentes en los resultados académicos. 
 

Migración y servicios públicos 

Barranquilla continúa siendo un destino para migrantes, y aunque la afiliación al sistema de salud ha mejorado, el documento señala que aún no alcanza al 50 % de esta población. Por otro lado, el costo de los servicios públicos, especialmente el de la energía eléctrica, es uno de los más altos del país. "En 2023, el kilovatio hora para el estrato 4 en Barranquilla costaba $1.100, mientras que en ciudades como Medellín y Bogotá era cercano a los $830", explicó Avendaño.  

Entre 2018 y 2023 la inflación en alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles ha sido mayor que la del nivel nacional, lo que se atribuye principalmente al precio de la energía.
 

Seguridad y demografía

El informe también alerta sobre un incremento en las extorsiones, que entre 2018 y 2023 se multiplicaron por ocho. Además, persisten altos índices de violencia de género y violencia intrafamiliar, lo que refleja un retroceso en términos de seguridad.  

En el ámbito demográfico, la ciudad enfrenta un envejecimiento progresivo de su población. En 2023, Barranquilla registró 69 adultos mayores por cada 100 menores de 14 años, un cambio significativo respecto a años anteriores.  Entre 2018 y 2019, según el Dane, la población aumentó en 36.000 personas. Entre 2024 y 2025 se proyecta un aumento de tan solo 8.000 personas. 

Conozca el informe completo aquí.