Debido a sus ubicaciones geográficas, el cambio climático impacta de manera directa en fenómenos como temperaturas extremas y lluvias intensas de Barranquilla y Bogotá. Con este contexto, la docente Natalia Hoyos Botero, del Departamento de Historia y Ciencias Sociales de Uninorte, colidera el proyecto ESCALA (Estudio de Salud Urbana y Cambio Climático en Asentamientos Informales de Latinoamérica), financiado por Lacuna Fund, que busca generar datos cuantitativos y cualitativos sobre el cambio climático y su relación con la salud en áreas vulnerables de estas ciudades.

En colaboración con la Universidad de los Andes y la Universidad de Drexel, el estudio involucra un equipo interdisciplinar de Uninorte compuesto por docentes de los departamentos de Salud Pública, Química y Biología, Ciencias Políticas, Historia y Ciencias Sociales, además de estudiantes de posgrados como la Maestría en Ingeniería Civil, Salud Pública y el Doctorado en Ciencias Naturales. La investigación se enfoca en la evolución de diversos factores durante un periodo de 20 años.

Los asentamientos estudiados se seleccionaron con base en criterios como la tenencia de la propiedad, el hacinamiento, los materiales de construcción de las viviendas y el acceso a servicios de agua y alcantarillado. En Barranquilla, los investigadores han visitado áreas como La Playa y barrios del sur como Siete de Abril y El Bosque. En Bogotá, las exploraciones se realizaron en Ciudad Bolívar, prestando especial atención a la influencia del TransMiCable en la conectividad del sector.

El proyecto incluye además el entrenamiento de un modelo de inteligencia artificial, que usará las imágenes de las fachadas de las casas para evaluar si una vivienda está en un asentamiento precario.
 

Participación comunitaria

Para la recolección de datos, además del trabajo de campo, se realizan grupos focales o diálogos territoriales, en donde los líderes comunitarios comparten problemáticas de sus barrios relacionadas con el cambio climático, pero, sobre todo, soluciones. Uno de esos diálogos territoriales se llevó a cabo en el BibLab de la Casa de Estudio Alfredo Correa de Andreis de Uninorte, con habitantes de La Playa y Las Flores. 

El estudio finaliza el próximo 30 de noviembre. Con los resultados se generarán publicaciones académicas, reuniones con las comunidades para retroalimentarles y datos que serán analizados para tener documentos que destaquen la importancia de estudiar cambio climático y salud en asentamientos informales en el sur global.