Durante la etapa universitaria los jóvenes en su mayoría centran su atención en asistir a las clases, estudiar para los parciales y ganar las materias, por lo general nunca se preguntan sobre qué pasará con sus vidas una vez se gradúen. 

Cuando llegan a los últimos semestres académicos, nace una nueva preocupación: La vida laboral. Preguntas como, me gradué y ¿ahora qué? ¿Cómo me preparo para una entrevista de trabajo? ¿Qué debo plasmar en mi hoja de vida? ¿Por dónde empiezo la búsqueda de empleo? son la que llegan a la mente luego de recibir el diploma. 

Una de las principales preocupaciones de la mayoría de los recién graduados e incluso de los que ya tienen algún tiempo de haber recibido su grado, es el tema de la búsqueda de empleo. Mónica Herrera, quien además es especialista en Gerencia del Talento Humano, establece 4 aspectos clave que se deben tener en cuenta al momento de buscar un empleo: 

1. Organizar un CV concreto y claro (máximo 2 hojas), en donde se plasmen los aspectos más relevantes como un perfil general de la persona, información personal, experiencia laboral, etc. La revisión y actualización de la hoja de vida debe ser un proceso constante apoyado de un profesional que brinde una retroalimentación precisa de lo que debe o no debe ir plasmado en un CV.

2. Buscar empresas donde el producto o servicio e incluso la cultura organizacional, sea compatible con la forma de ser y de pensar.

3. Circular el CV en los buscadores o portales de empleo, como Turpial, El empleo.com entre otros, pues no se puede pretender que el trabajo llegue solo.

4. Finalmente, se debe realizar un trabajo planeado y organizado, es decir, que el proceso de postulación a las ofertas laborales sea bien pensado y se escojan de acuerdo con los intereses propios que se ajusten al perfil y a las labores deseadas.

Otra de las principales preocupaciones de los jóvenes es cómo enfrentar una entrevista laboral, lo cual es totalmente normal debido a que se trata de un momento de incertidumbre. Lo mejor para estar bien preparado es contar con un mentor que pueda brindarle a la persona una retroalimentación inmediata con las herramientas necesarias para estar seguro de cómo se debe ir vestido, qué colores usar, qué se debe decir y que no, en