El avance en el conocimiento médico en el siglo XX, se logró gracias al desarrollo de nuevas tecnologías que miles de investigadores de diferentes áreas del conocimiento realizaron y que permitieron multiplicar las posibilidades de conocer el funcionamiento de los seres vivos a nivel molecular y celular, y su aplicación en el diagnóstico y, en algunos casos, en el tratamiento de enfermedades que eran impensables realizar hace unos pocos años.