Por María Fernanda Salgado
fmsalgado@uninorte.edu.coLas cifras oficiales sobre acceso, permanencia y graduación en la educación superior colombiana plantean retos importantes para el sistema educativo. Según estadís ticas del Ministerio de Educación Nacional, casi 500 mil estudiantes finalizan el bachillerato cada año y 192 mil ingresan de inmediato a la universidad, lo que plantea que más del 50 % de los jóvenes que terminan el colegio no acceden a educación superior de ningún tipo. La tasa de cobertura, en lugar de aumentar, ha disminuido del 52,81 al 51,6 por ciento en los últimos cuatro años. Sumado a que en el 2020 cerca de 243 mil estudiantes universitarios deserta ron del sector oficial y no oficial.
Teniendo en cuenta el panorama nacional, y con el objetivo de fomentar una educación de calidad y avanzar
hacia un modelo abierto, MinEducación creó los Lineamientos de la Política de Educación Inclusiva e Intercultural, con los cuales busca incentivar en las instituciones de educación superior (IES) la definición de acciones y estrategias para fortalecer las condiciones de calidad desde un enfoque diferencial.
Investigadores de la Universidad del Norte han venido construyendo evidencias para conocer la diversidad de sus estudiantes, profesores y colaboradores, con el fin de impulsar la generación de cambios, fundamentados en la investigación a través de la formulación de una política de educación inclusiva. Pensar en la educación desde esta perspectiva implica desarrollar procesos de caracterización de las poblaciones más proclives a ser excluidas del sistema educativo para determinar cuáles son las barreras que existen en materia de inclusión.
El estudio, promovido por la Dirección de Extensión y el programa Uninorte Incluyente, es desarrollado por PBX, Grupo de Investigación en Comunicación, Cultura y Cambio Social, y tiene por objetivo identificar esas barreras para sentar las bases del desarrollo de la Política de Educación Inclusiva e Intercultural en Uninorte. Paralelamente, el estudio aporta a la formulación del Índice de Inclusión para Educación Superior (INES), una herramienta que permite revisar las prácticas institucionales a la luz de criterios inclusivos, con el fin de reconocer el estado actual de los procesos, políticas, acciones y percepciones alrededor de la diversidad y la inclusión, que sirve para analizar las fortalezas y oportunidades de mejoramiento.
“Actualmente, las IES han entendido que la educación debe partir de que todas las personas tenemos características distintas, y el reto del sistema es adaptarse y liderar acciones o transformaciones institucionales para dar respuesta a esas necesidades. La Universidad del Norte hace parte de la Red de Instituciones de Educación Superior para la Discapacidad, conformada por más de 50 Instituciones que le apuestan a la educación como eje transformador de la sociedad”, argumenta la comunicadora social y doctora en Psicología.
El proceso metodológico aplicado para la caracterización implicó cuatro etapas claves. Primero, la conformación de un equipo coordinador responsable de dar soporte al diseño y realización del estudio. Este fue integrado por la Comisión de Política e Índice de Inclusión, formada por decisores institucionales, funcionarios encargados del manejo de la información de estudiantes, profesores y colaboradores administrativos responsables de los procesos de admisión de estudiantes y contratación de funcionarios, dependencias jurídica, Gestión Humana, Centro para la Excelencia Docente (CEDU), Bienestar, Centro
de Recursos para el Éxito Estudiantil (CREE), Centro Médico, entre otras, docentes, estudiantes y colaboradores pertenecientes a las poblaciones identificadas. Posterior a la conformación del equipo coordinador, se procedió a la identificación y priorización de la información requerida y las fuentes, y se diseñó un sistema de compilación y análisis de las mismas. La recolección de información se realizó a través de tres técnicas cualitativas y cuantitativas. La primera fue la revisión de fuentes documentales en bases de datos de los procesos administrativos y académicos de la universidad.
Posteriormente, se procedió a realizar encuestas que incorporaron las variables equidad de género, diversidad, discapacidad, etnia e inclusión social. Se aplicaron cuestionarios de carácter anónimo, a través de plataformas digitales, y cuyas respuestas fueron facultativas, cada uno dirigido a un grupo poblacional. Los resultados fueron organizados teniendo en cuenta las poblaciones identificadas en la propuesta técnica: género, LGTBIQ, etnia, personas en situación de discapacidad o en situación de desventaja social.
Finalmente, a través de un cuestionario semiestructurado, se desarrollaron grupos focales en donde los participantes podían proponer temas de conversación diferentes a lo preestablecido. Con estudiantes se realizaron 5 grupos focales divididos por las comunidades estudiantiles Makeda, EQUN, Uninorte Diverso, BK2 y Uninorte Capaz, y el número de participantes fue de 19 voluntarios. Con los colaboradores y docentes se desarrollaron 11 grupos focales y participaron 46 voluntarios.
La asistente de investigación y egresada de Comunicación Social y Periodismo, Suhaira Kharfan, resalta que el criterio que tuvieron en cuenta los gestores del proyecto para la selección de las cinco variables y la priorización de los grupos poblacionales radica en el estudio de las experiencias de otras instituciones a nivel nacional e internacional. “Previo al proceso de caracterización de las poblaciones,además de un riguroso proceso de revisión de literatura que nos permitió incorporar experiencias diversas a nivel internacional, consultamos previamente a dos universidades a nivel nacional y a una organización privada e internacional para conocer sus experiencias de trabajo en el área de inclusión y diversidad. Así pudimos identificar fortalezas y debilidades del proceso de caracterización para adaptarlas al contexto local”, explicó la egresada.
estudiantes encuestados
Según el docente Jair Vega, sociólogo y magíster en Estudios Políticos y Económicos, algunos de estos hallazgos señalan que “si bien la Universidad tiene retos en materia de inclusión, están más relacionados a la influencia del contexto cultural que a la permisividad de las políticas internas de la institución. Por ello, la finalidad de este estudio es poner sobre la mesa las barreras identificadas en temas de equidad de género, diversidad, discapacidad, etnia e inclusión social, con relación a las poblaciones proclives a ser excluidas del sistema y así posibilitar la toma de decisiones”.
En relación a la representatividad por sexos, según las cifras de distribución global del personal contratado, la universidad refleja unos porcentajes equitativos en la cantidad de mujeres y hombres que trabajan en la institución.
De acuerdo con Jair Vega, la caracterización de la población y los avances hacia esta política constituyen un conjunto de indicadores que pueden contribuir a un sistema de información para el monitoreo permanente de los avances en materia de educación inclusiva en la universidad.
“La inclusión va a ser uno de los temas claves en la década de los años 20 del siglo XXI, muy conectados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, lo que implica un reto importante para las universidades. Por lo tanto, las instituciones de educación superior deben convertirse en agentes que jalonen y den muestra de cómo se puede construir la inclusión en los diferentes contextos. Es por ello que este tipo de estudios son relevantes, porque señalan la ruta para trabajar, con base en evidencia frente a los desafíos que nos plantea el tema de la inclusión”, acota Vega Casanova.
desde Uninorte Incluyente
del programa de cara al futuro?
- Crear comunidades de aprendizaje que involucren a todos los actores de la institución.
- Fortalecer esa sincronía entre la universidad y el campo laboral
- Desarrollo de la política de inclusión.
- Continuar la sensibilización a los profesores y estudiantes.
- Seguir reinventándose y apostarle a la transformación digital que beneficie a todos los grupos, especialmente a las personas con discapacidad.
Camilo Pérez
ecquintero@uninorte.edu.co
Jair Vega
jvega@uninorte.edu.co
Paola Alcázar
palcazar@uninorte.edu.com
Suhaira Kharfan
skharfan@uninorte.edu.co