Primeros logros del programa de fortalecimiento de la calidad en el Colegio El Cañahuate
En apenas ocho meses de implementación del programa, liderado por la Fundación Caujaral y el Instituto de Estudios en Educación de Uninorte, se ha mejorado el nivel de lectura de los estudiantes y el puntaje global de las pruebas Saber 11 subió en 26 puntos.
En 2023, la Institución Educativa Distrital (IED) El Cañahuate, del corregimiento La Playa, ocupó el tercer lugar en el ranking de los colegios que más avanzaron en Barranquilla en las pruebas Saber 11; pasó de tener un puntaje global de 214 en 2022 a obtener 240 en 2023. Aunque las directivas de la institución habían comenzado un proceso para mejorar su desempeño (en 2021 estaban en la categoría D), una parte de este logro se debe al Programa de Fomento de Trayectorias Exitosas, Educativas y de Vida, que desde hace ocho meses implementó la Fundación Caujaral y la Universidad del Norte para fortalecer las capacidades de estos estudiantes.
En una reunión realizada el miércoles, 31 de enero, en el Club Caujaral, se socializaron los principales avances del programa que apunta a mejorar la calidad educativa y el bienestar, de los niños y jóvenes de esta IED. Además, fue un momento propicio para invitar a los asistentes a seguir contribuyendo con donaciones para ejecutar el programa durante los cinco años que se han propuesto.
Sergio Espinosa, presidente del Club Lagos del Caujaral, recordó que cuando decidieron emprender esta causa, el colegio estaba pasando por momentos muy difíciles.
“Para nosotros es un orgullo saber lo que hemos logrado en tan corto tiempo. Esto demuestra que si seguimos trabajando en este sentido podemos lograr de verdad mejorar la calidad de la educación de estos muchachos. Y lo más importante, lograr que haya más profesionales, más técnicos, producto de este colegio. Si logramos preparar a un muchacho, mejorarle su calidad de la educación, va a poder integrarse a la sociedad de una manera mucho más positiva, mucho más participativa y es una persona que va a estar en menos riesgo de tener una vida antisocial”, señaló Espinosa.
Por su parte Adolfo Meisel, rector de Uninorte, hizo énfasis en que el principal problema del Caribe colombiano, su principal obstáculo para el desarrollo, es la educación y en particular la calidad. Aunque se ha avanzado bastante en cobertura, la calidad sigue siendo prioritaria, por eso celebró este tipo de iniciativas.
“La rentabilidad de la inversión en educación, tanto privada como pública, es enorme, y ustedes van a ver los resultados de este programa en corto tiempo. Siempre los resultados de costo beneficio son muy positivos”, indicó el rector.
En tan solo ocho meses que lleva de ejecución, el programa ya muestra resultados en los tres proyectos desarrollados con estudiantes de transición, 1°, 2° y 3° de primaria, y de 9°, 10° y 11° de bachillerato. El primero de estos “Aprendamos todos a leer”, aplicado en el grupo más joven, logró bajar de 82 % a 33 % el porcentaje de niños que estaban por debajo del estándar de lectura de la prueba EGRA (Early Grade Reading Assessment).
El segundo proyecto, denominado “En busca de la excelencia académica”, involucra involucrar a toda la comunidad educativa en un modelo pedagógico de aprendizaje activo que refuerza el desarrollo de las competencias básicas de los estudiantes de 9º a 11º, y sus logros se reflejan en las pruebas Saber 11.
“Obtener 26 puntos de diferencia en la media de la prueba saber 11 de un colegio es altísimamente significativo. En muchas otras instituciones cuando se avanza, lo normal son cinco puntos”, indicó José Aparicio, decano del Instituto de Estudios en Educación de Uninorte, área académica que coordina el programa.
El tercer proyecto es “Juntos a estudiar, trabajar o emprender”, que ofrece orientación socioocupacional para los alumnos de 9° ,10° y 11°, sus familias y docentes. “Nos propusimos acompañar a esta comunidad para potencializar lo que ellos venían haciendo, porque encontramos allí una comunidad que, a pesar de las dificultades, le siguen poniendo ganas, por lo que todos los esfuerzos que hagamos por apoyar esa energía valen la pena. Detrás de cada resultado están las historias de vida que empezaron a cambiar por ese trabajo conjunto”, agregó Aparicio.
Una de esas historias de vida es la de Isabella Peñalosa, beneficiaria del programa y bachiller de El Cañahuate en 2023. De su experiencia con los tutores del programa, destaca que les proporcionaron a todos los estudiantes la oportunidad de formarse en conocimientos y los invitaron a soñar con estudiar, ser alguien en la vida y proyectarse hacia un futuro como personas y profesionales de éxito.
“Sé que la próxima promoción, con su apoyo, con los profesores de la universidad, va a tener muchas más oportunidades, van a lograr muchas más cosas. Todo lo que necesita el colegio es apoyo en su estructura, en más temas de práctica para los estudiantes, para que se formen y sean grandes profesionales, porque si algo inculcó este proyecto a mis compañeros fue los sueños y las ganas de ser alguien en la vida, de proyectarse, educarse, formarse y, al final de cuentas, ser profesionales y personas capaces de lograr cosas”, dijo.
El rector del colegio, Miguel Celin, aprovechó para agradecer el esfuerzo que todos los implicados han hecho para apoyar la escuela. “Nosotros podemos aspirar de alguna manera a tener una educación de calidad, pero si no tenemos insumos no lo vamos a lograr. Si no tenemos una buena infraestructura, unas buenas locaciones, unos buenos elementos, no lo vamos a lograr. Es un conjunto de cosas”.
La Fundación Caujaral seguirá comprometida con el programa, que en principio está pensado para cinco años, para lo cual seguirá promoviendo la donanción en los socios del Club Lagos Caujaral. Así mismo, la Universidad del Norte mantendrá su respaldo con el equipo de profesionales del Instituto de Estudios de Educación para reforzar las competencias de los estudiantes de El Cañahuate y brindarles la oportunidad de continuar su formación profesional.
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