“Es posible que las playas de Cartagena estén llenas de metales pesados”

Respondiendo a denuncias sobre la presencia de residuos peligrosos tras el dragado de la bahía de Cartagena, la Contraloría General de la República señaló el pasado miércoles que existen evidencias de metales pesados como mercurio, zinc y cobre en la bahía, en concentraciones que se constituyen factores de riesgo para comunidades de Cartagena y Tierrabomba, corregimiento insular de la capital de Bolívar.

De acuerdo con un grupo de expertos, liderado por los grupos de investigación en Geociencias, GEO4, y en Física Aplicada, un cambio en el tipo de sedimentos en el suelo marino de la bahía en las últimas cuatro décadas ha propiciado la acumulación de estos metales pesados.

A través del estudio de 250 muestras obtenidas del fondo del océano, los investigadores pudieron determinar que en la actualidad los sedimentos de la bahía de Cartagena son principalmente lodos y limos, mientras que registros de hace 40 años muestran que estos solían ser de arenas gruesas de origen calcáreo, producto de la meteorización de los arrecifes.

Juan Camilo Restrepo, docente e investigador del departamento de Física y Geociencias de Uninorte, señala que este cambio obedece a las dinámicas fluviales del Canal del Dique y su estrecha relación con la bahía, a la cual ha transportado sedimentos más finos, propios de ecosistemas ribereños y ajenos a ambientes marinos.

De acuerdo con Restrepo, los metales pesados tienen una tasa de permanencia mucho mayor al mezclarse con sedimentos finos. “Los limos y las arcillas se van pegando a los metales y esos metales pesados se van acumulando y son el sustento perfecto para que los peces del fondo se coman los sedimentos e introduzcan el metal pesado dentro de la cadena alimenticia”, explica.

Por otro lado, Restrepo afirma que el dragado permanente de la bahía debido al número creciente de embarcaciones que la transita implica la movilización de grandes volúmenes de sedimento. “Todo ese sedimento que estaba acumulando esos metales pesados durante tanto tiempo se agita y los metales quedan dispersos en el agua, disponible para cualquier tipo de procesos”. Estos metales pueden ser nocivos para los humanos, no solamente por ingesta sino por contacto

A través de la investigación, los expertos encontraron que en épocas húmedas, como el fenómeno de La Niña en 2010, toda la circulación de la bahía está controlada por el Canal del Dique y por tanto las aguas llegan a la bahía interna de Cartagena, hasta áreas como el Muelle de los Pegasos.

“Son áreas que estaban alejadas de toda esa intervención y ahora están sujetas a la acción de Canal el Dique. Lo que resaltamos aquí es cómo un ecosistema que era completamente marino, se ha transformado de manera significativa en los últimos 40 años, perdiendo todas sus características naturales”, sostiene, y afirma que esto tiene serias implicaciones para el manejo de las playas turísticas.

“Hasta las playas de Bocagrande y Castillogrande llega la influencia del Canal del Dique. Existe acumulación de estos segmentos finos y es muy posible que se estén acumulando metales pesados en playas que tienen un volumen importante de turistas”.

Agrega Restrepo que es por ese aspecto tan importante de la economía cartagenera que este tipo de afirmaciones “no sale mucho a la luz pública”.

“Vaya usted a decirle a un turista que no se meta a las playas de Cartagena, para que vea lo que le va a responder. Pero lo cierto es que este ecosistema ha cambiado ampliamente. Eso lo puede sustentar a simple vista una persona de edad que haya visto la bahía los últimos 40-50 años. Es completamente diferente".

Por Andrés Martínez Zalamea