Estudiantes de Arquitectura reimaginan la relación medio ambiente-sociedad en el Workshop Mallorquín

En el taller charlan con líderes del proyecto, profesores del departamento y académicos invitados para encontrar nuevas formas de relacionarse con uno de los ecosistemas naturales más importantes de nuestro territorio. Durante el primer día visitaron el proyecto.

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Por: José Luis Rodríguez R.

16 jun 2023

¿Puede la recuperación de un ecosistema compatibilizar con espacios de contacto entre el medio ambiente y la sociedad? ¿Cómo los ciudadanos pueden interactuar con las ecologías en escenarios de cambio y desarrollos futuros? Estas son algunas de las preguntas que se debaten y reflexionan en el 'Workshop Mallorquín: paisaje y territorio del Caribe', organizado durante el receso académico por el Departamento de Arquitectura y Urbanismo de la universidad, con el objetivo de explorar nuevas formas de relacionarse con la ciénaga de Mallorquín, uno de los ecosistemas más importantes de la región.

Las intervenciones del proyecto de recuperación de la ciénaga de Mallorquín, la cual fue declarada sitio natural de gran importancia e interés estratégico para el turismo, apuntan a revitalizar este valioso ecosistema y generar cambios significativos tanto en el ámbito ambiental como social. Es por eso que, del 14 de junio al 7 de julio, un grupo de estudiantes de la unidad académica charlan con líderes del proyecto, profesores del departamento y académicos invitados para encontrar nuevas formas de relacionarse con uno de los ecosistemas naturales más importantes de nuestro territorio, además de visitar el proyecto. 

El profesor Yalmar Vargas, director del departamento de Arquitectura y Urbanismo de Uninorte, destacó la importancia del taller como una oportunidad para que los estudiantes amplíen su perspectiva y se conecten con la ciénaga de Mallorquín. "Al igual que el Malecón, que nos abrió la mirada hacia el río Magdalena, pienso que este proyecto es cómo abrirle la mirada a los estudiantes a este lugar que muchos no conocen. El espacio del proyecto frente a la vía y la ciudad es importante para desarrollar un ejercicio crítico como ciudadanos", señaló.

La recuperación de la ciénaga de Mallorquín es el proyecto ambiental más ambicioso que se desarrolla en la región Caribe, y que le apunta al crecimiento del ecoturismo y el conservacionismo, de la mano de la visión de convertir a Barranquilla en la primera biodiverciudad de Colombia.
Juan Manuel Alvarado, gerente de Ciudad de la Alcaldía, durante el taller.


El ecoparque propuesto por la Alcaldía, ubicado entre el barrio Las Flores y el corregimiento La Playa, tiene proyectado ofrecer a los visitantes la oportunidad de disfrutar de recorridos ecológicos por senderos que atraviesan el manglar y el agua de la ciénaga. El avistamiento de aves, la bicirruta, los deportes náuticos y actividades culturales serían algunas de las actividades disponibles. 

Juan Manuel Alvarado, gerente de Ciudad de la Alcaldía, compartió con los estudiantes la complejidad del proyecto y las etapas involucradas en la intervención de Mallorquín. Destacó la importancia de abordar los desafíos sociales en las comunidades circundantes de Las Flores y La Playa, así como la recuperación de un antiguo botadero de basura. "Tenemos unas comunidades aledañas con retos sociales grandes. Fue muy importante pensar cómo recuperamos a la comunidad que vive alrededor de esta, esto es un proyecto integral que involucra a la ciudadanía", indicó.

La Alcaldía informó que ha brindado acceso a formaciones a los habitantes de ambas comunidades, para que mejoren sus habilidades de pesca, así como cursos orientados al aprendizaje en la operación ecoturística y sean ellos quienes ofrezcan tours de avistamiento de aves, tours para aprender a pescar y demás actividades que se generarán, no solo en la zona de Mallorquín, sino también en la playa de Puerto Mocho.


 

Durante el taller, los estudiantes también han tenido la oportunidad de recibir exposiciones de expertos en el campo. La arquitecta paisajista Diana Wiesner compartió el jueves su perspectiva sobre el desarrollo de ciudades sobre el agua, mientras que la profesora Catalina Mora Ortiz, magíster en Innovación y Emprendimiento, dirige el taller, enfocándose en la conexión de la ciudad con espacios urbanos aparentemente distantes.

"Es una experiencia reflexiva, sensitiva, en donde los estudiantes van a reencontrarse con la relación que debemos guardar todos con el agua y los ecosistemas. Es un momento importante a nivel global, considerando que estamos enfrentando el cambio climático y nos toca repensar la arquitectura desde el territorio y el paisaje", puntualizó la profesora Ortiz.

De acuerdo con Alvarado, el proyecto del ecoparque se destaca por su enfoque participativo, que ha incluido escuchas activas y cartografía social para identificar los problemas de la comunidad y buscar soluciones conjuntas. "El mensaje aquí es que es un proyecto de largo plazo, hemos tenido 23 socializaciones, capacitaciones con la gente, ferias de servicios con la comunidad. La clave es mostrarle a la gente en qué consiste el proyecto, que entiendan el origen de lo que estamos haciendo", agregó Alvarado.

El 'Workshop Mallorquín: paisaje y territorio del Caribe' ofrece a los estudiantes de Arquitectura de Uninorte una experiencia enriquecedora para repensar la arquitectura desde una perspectiva territorial y paisajística. 

 

"Este es mi primer vacacional y ha sido una buena experiencia que me ha permitido aprender más allá del salón. No solo conocimos la ciénaga y el proyecto, sino que estamos conociendo cómo su construcción debe impactar el medio ambiente y a las comunidades aledañas. Entendí que el objetivo es sea un parque con un enfoque de contemplación y que arquitectónicamente debe ayudar a conectar con la naturaleza”, concluyó Andrés Bustamante, estudiante de séptimo semestre de Arquitectura.


 

 

 

 

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