Clase para pensar siglo XXI: una reflexión sobre las prácticas docentes

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20 feb 2014

Según los estudios realizados por el Instituto de Estudios en Educación (IESE) de Uninorte, los niños y jóvenes del Caribe colombiano presentan una gran deficiencia en las habilidades que son prerrequisito para iniciar su escolaridad.

En el marco del área estratégica de investigación Infancia y Juventud, la docente Luz Stella López ha liderado los estudios para hacer un diagnóstico de cómo está la educación escolar en la región. Los resultados evidencian que en gran medida la deficiencia en los menores se debe a problemas con el servicio prestado por los docentes.

A partir de estos hallazgos, los investigadores de Uninorte diseñaron una estrategia para intervenir en los docentes y de esta forma poder impactar de forma indirecta en el desarrollo de los niños. Para esto se creó un modelo de aprendizaje multidisciplinar llamado "Clase para Pensar Siglo XXI".

Este es un modelo que busca fortalecer el desarrollo en los procesos cognitivos para la resolución de problemas académicos y sociales en niños y jóvenes. En estos momentos se trabaja específicamente con los docentes.

"Se ha comprobado que las debilidades encontradas aumentan de acuerdo a las prácticas, conocimientos y creencias tradicionales de los docentes. Antes solo hacíamos diagnóstico en los niños, ahora intervenimos en los docentes", dijo Luz Stella López.

Para López, hay que fortalecer el conocimiento del docente, porque nadie enseña lo que no sabe. También deben trabajar en las creencias (aquello que los docentes sienten como cierto) de estos para poder cambiar sus prácticas.

Las creencias tienen compontes cognitivos, de sentimientos y comportamentales. "Un docente que tiene una creencia sobre cómo se enseña, actúa de acuerdo a eso que a lo que le han enseñado. A veces cambia su conocimiento, pero no cambia la práctica, porque no creyó en eso", agregó.

En el desarrollo del modelo de Clase para pensar siglo XXI hay un componente transversal: la reflexión del docente. "Cuando un docente reflexiona sobre su práctica, tiene muchas más posibilidades de cambiar. Lo hacemos reflexionar lo que aprendió, cuál es su práctica, cómo debe ser el desarrollo del estudiante, cómo va mejorando", concluyó López.

Actualmente, la Clase para Pensar Siglo XXI es un diplomado dirigido a docentes de varias disciplinas y está compuesto por 10 módulos, cuyo diseño fue dirigido por López y su equipo de investigación, apoyado por un grupo de estudiantes del Programa de Licenciatura en Pedagogía Infantil, de la Maestría en Educación y por profesionales interdisciplinarios de los programas de Educación, Medicina y Comunicación Social de la Universidad del Norte.

En noviembre serán presentados los resultados de esta intervención, de la que el grupo de investigadores espera encontrar mejoría en las habilidades cognitivas de los niños. La investigación que generó la creación del programa fue realizada con 350 niños del grado de Transición de colegios públicos de Barranquilla, Cartagena y Santa Marta.

Por Estela Guevara

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